Las asociaciones de víctimas y prevención de accidentes P(A)T-AP(A)T, Aesleme y Stop Accidentes, conmemoraron el Día Mundial de las Víctimas de Accidentes de Tráfico, en la mañana del pasado domingo 18 de noviembre.
El acto tuvo lugar en el Parque del Buen Retiro, en la Plaza del Estanque, y contó con diversas actividades, como el Taller Cuentacuentos para niños o la lectura de poemas por parte de Alejandro Céspedes, autor del libro "Flores en la cuneta". Además, se realizó un panel del recuerdo, en el que quedaron reflejadas todas las vidas perdidas (representadas con siluetas negras) y que se han salvado, comparando las cifras (siluetas blancas), desde el año 2005, cuando la ONU declaró que el tercer domingo de noviembre sería el Día de las víctimas de accidente de tráfico. También se instaló una pantalla gigante sobre la que se proyectaban los rostros y nombres de muchas víctimas de siniestros de tráfico.
Los representantes de las asociaciones de PAt, Aesleme y Stop Accidentes, contaron con el apoyo de muchos representantes institucionales como Dña. Mónica Colás (subdirectora de la D.G.T), D. Bartolomé Vargas (Fiscal de Seguridad Vial), el General Jefe de la dirección general de la Policía y de la Guardia civil de la agrupación de Tráfico, D. Antonio Dichas y el Director Nacional de la Pastoral de la carretera, José Aumente. Tras la lectura de un manifiesto, redactado específicamente para este Día, la ofrenda de flores en recuerdo de las víctimas y la interpretación de la pieza musical de Pau Casals “El canto de los pájaros”, al violonchelo, a cargo de un miembro de la Orquesta Filarmónica de Chamartín, hubo un minuto de silencio,la suelta de globos blancos y la clausura y despedida.
Para clausurar la conmemoración de este año 2012, el lunes 19 de noviembre, a las 14 horas, los representantes de las asociaciones y las autoridades públicas, llevaron el centro de flores al monumento en recuerdo de las víctimas de la Violencia Vial (situado en la sede de la DGT). Este monumento, una escultura de bronce realizada por Rosa Serra, fue inaugurado en 2007 y simboliza a la familia mediante dos figuras que se abrazan. En su pie se puede leer la frase “En memoria de las víctimas por accidente de tráfico, contra la indiferencia y el olvido”.